La mayor parte de lesiones de es tipo se dan a partir de fuentes artificiales que generan energía en el ámbito doméstico, pero también laboral. Toda manipulación de aparatos eléctricos, electrodomésticos, lámparas, enchufes, condiciones inadecuadas o no tomar las medidas de prevención necesarias pueden ocasionar una lesión eléctrica. La única excepción a este tipo causas es el rayo cuyo origen es natural y pueden llegar a resultar extremadamente peligrosos debido a su alto voltaje, intensidad y grandes temperaturas acumuladas durante un tiempo muy limitado (fracciones de segundo) pero que puede causar la muerte de la persona.
Por lo general, una quemadura eléctrica se considera grave porque no se sabe por dónde ha pasado la electricidad. El cuerpo humano es capaz de cerrar el circuito eléctrico y provocar una diferencia de tensión, por lo que habrá un punto de entrada y otro de salida.
La electricidad pasa por los huesos, y la energía en forma de calor sale de estos huesos hacia el exterior. Esto provoca una serie de efectos en los tejidos como una sobreestimulación o un efecto térmico, que pueden ser locales y afectar todo el organismo.
La gravedad de estas lesiones va a estar condicionada por el origen eléctrico. En el ámbito del hogar se utiliza la corriente alterna, mientras que en el de la industria y empresas el subministro es continuo. Ahora bien, debe considerarse otros parámetros:
- Voltaje: Representa la diferencia de potencial eléctrico entre dos puntos. El alto voltaje se considera una cifra superior a 1000 voltios, mientras que cifras inferiores representa lo que se conoce como bajo voltaje. Los altos voltajes suelen ser causantes de lesiones térmicas, mientras que las de bajo voltaje ocasionan afectaciones en el organismo debido a una sobreestimulación.
- Resistencia: Dentro del cuerpo se consideran órganos con más conductividad, es decir, permiten más fácilmente el paso de la electricidad. Mientras que otros tienen más resistencia y a la corriente eléctrica le es más difícil pasar.
- Intensidad: Hay que considerar que, a pesar del tipo de corriente y el voltaje, en algunos puntos del cuerpo puede pasar un mayor flujo de electricidad por unidad de tiempo, con lo que ya tenemos una idea de que una gran intensidad puede producir lesiones cada vez más graves.
¿Qué otros factores pueden influir en la gravedad de lal lesiones eléctricas?
Ante una lesión eléctrica, el tiempo es un factor determinante ya que, por lo general, cuando una persona se pone en contacto con una fuente eléctrica, cuanto más tiempo pase en contacto, más graves serán las lesiones. Si además, el entorno está favorecido por la presencia de humedad, tenemos que pensar que ésta última, condiciona la resistencia, por lo que un ambiente húmedo moja la piel y hace que la electricidad pueda pasar.
El desplazamiento o trayectoria del paso de la corriente es imprevisible. La electricidad tiene tendencia a seguir el camino más corto entre el punto de entrada y de salida. Las lesiones más normales son la entrada por una mano y la salida por una mano o un pie. Lo malo es que al atravesar el tórax, y producir una sobrestimulación, genera lesiones cardíacas o lo que es peor, que la electricidad intente salir por orificios como ojos y orejas, produciendo pérdida de visión o incluso daño cerebral.
Síntomas de una persona electrocutada
Síntomas Locales
La lesión local más característica (pero no la única) de la electricidad es la quemadura eléctrica que presenta diferencias sustanciales respecto a otros tipos de quemadura como las de fuego, químicas o de fricción. Primero de todo, se observa una lesión o quemadura de entrada. Este tipo de lesión no es muy grande, está definida y tiene un aspecto blanquecino o gris. La persona no se queja puesto que la «entrada» es indolora y la piel se queda dura. Esto no debe tomarse en cuenta ya que el aspecto exterior de estas lesiones no son importantes, sino que la verdadera lesión se produce debajo de la piel, llegando incluso al músculo o al hueso.
La lesión «de salida» es mucho más grande, y es como un cráter: se hunde hacia el interior y se eleva por los laterales. El color es más oscuro que la anterior y pueden haber varias lesiones más a su alrededor.
Síntomas Generales
Aquí se da lo que conocemos como electrocución o choque eléctrico ya que el efecto de la electricidad ha sido la sobreestimulación de los tejidos, produciendo contracturas musculares involuntarias por todo el recorrido de la electricidad hasta el punto de salida. Esto representa el mayor inconveniente de todos, pues si las contracciones se mantienen pueden afectar musculatura necesaria para respirar e impedir el paso del aire.
Si la descarga eléctrica se produce en la zona del corazón, ésta puede provocar fibrilación ventricular y la persona pasar a un paro cardíaco. En el mejor de los casos, las estimulaciones cardíacas pueden originar asistolía o disatolía. Si la descarga acaba produciéndose en la cabeza, la persona puede entrar en estado de coma, por alguna lesión interna que conlleve hemorragia o edema. Al hacer presión, la persona se desvanece sin llegar a un estado de shock.
Protolo de actuación para casos de electrocución
- Activar el protocolo PAS
- Observar el entorno: en ocasiones primero hay que rescatar a la víctima y luego antender las lesiones
- La víctima puede estar en contacto todavía con la fuente de electricidad o a una distancia de la fuente debido a la proyección de la descarga
- La víctima puede estar consciente o inconsciente
- NUNCA tocar al accidentado directamente cuando está en contacto con la corriente eléctrica
- NUNCA echar agua al accidentado si su ropa se prende de fuego ya que es muy conductora y agravaría la situación (debe apagarse por sofocación)
- Detectar las instalaciones, los botones, enchufes o los sistemas de seguridad para desenchufar, apagar o cortar el subministro de energia
- Si se detecta peligro de incencio, debe avisarse a la compañía eléctrica para que corte inmediatamente el subministro en la zona de peligro
¿Y si no hay forma de separar a la víctima de la corriente eléctrica?
Se emplearán trajes aislantes para el caso de accidentes industriales, o bien, con palos de madera y cinta aislante intentar separar a la víctima de forma improvisada, siempre y cuando, la nueva situación no empeore la que ya tiene (p.ej que se caiga varios metros al suelo porque está subido en un andamio, etcétera…).
Por eso, las mantas, toallas o cojínes puede servir como amortiguador de caídas inesperadas cuando intentemos el rescate y la separación.
- Rescatada la víctima, se realiza el control de los signos vitales (pulso, respiración, estímulos, grado de alerta,…).
- Si la víctima está inconsciente y se sospecha de fibrilación ventricular (pulso débil pero muy rápido) será conveniente estar preparado para una RCP.
- Si la víctima respira débilmente, también es probable que la sobrestimulación de la descarga en zona aérea no le permite respirar correctamente.
- Si el estado de coma es por lesión cerebral, pondremos a la víctima en posición de seguridad (PLS) a la espera de que pueda ser trasladada al centro más cercano.
- Revisar las lesiones graves que pueda tener la víctima: traumatismos, luxaciones, fracturas, ….
- TODAS las QUEMADURAS ELÉCTRICAS externas deberán seguir el tratamiento general básico de las QUEMADURAS normales, con la diferencia de vigilar a la víctima durante unas horas.